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One thought has been in my mind for a while:

The importance of education and value for things starts at home. Mum, Dad and carers including nannies, play a paramount role upbringing a healthy child.

I remember clearly that, neither my brothers or I were allowed to eat chocolate or Nutella on any given day of the week but Thursday. That was the rule because it was my parents house and it was like the holly grail:

“No one breaks that rule, period”. We actually never questioned it, it was like that because it was always like that and because mum said so.

My mother-very very wise- already knew about the consequences of sugar and treats and hence, we could only eat Chocolate/Nutella -our choice- once a week and only for the after school meal. But, it did not stop there, my mum measured the amount we were having and of course she never ever let us make our own sandwiches because we, -as children- would have most likely finish the whole thing in seconds. She wanted us happy but healthy, very simple however unfortunately quite difficult to implement nowadays.

The same was with fruit juice, there were oranges, apples, bananas but never apple juice or any other, only freshly squeezed orange juice and in seldom occasions. My mum wanted us to have the fruit. That was the best option then and it is still the best option now many years later. She knew too well about the amount of hidden sugar and E numbers therefore she protected us as much as she could.

My mum was not a nutritionist neither a doctor rather a housewife absolutely devoted to make her children better than her. She would provide with all the necessary and at the same time she will promote the sentence:

“Everything in moderation”

May be our parents used to have much more control of our lives when we were younger? Or may be we had from the very beginning much more discipline because our dear parents used to pray by example too? They were both eating treats occasionally and being extra careful with food the day after…I wish some of the already overweight children now could see why when his/her father says ‘no more’ it is for his/her own good?

Food for thought.

I wonder what happened to our generation, where did we as a society lose It, and by ‘It’, I mean the common sense that treats are just that treats, not for every day and only in small quantities. Doesn’t every body know that?

Our children are the future, let’s not underestimate that!

Recuerdo claramente que ni a mis hermanos ni a mí se nos permitió comer chocolate o Nutella en ningún día de la semana, excepto los jueves. Esa era la regla porque era la casa de mis padres y era como el santo grial:

“Nadie rompe esa regla, punto”. En realidad nunca lo cuestionamos, era así porque siempre era así y porque mamá lo decía.

Mi madre, muy muy sabia, ya sabía sobre las consecuencias del azúcar y los dulces y, por lo tanto, solo podíamos comer Chocolate / Nutella, nuestra elección, una vez a la semana y solo en la comida después de la escuela. Pero no se detuvo allí, mi madre medía la cantidad de chocolate que ingeríamos y, por supuesto, nunca nos dejó hacer nuestros propios sándwiches porque nosotros, como niños, lo más probable es que nos lo hubiésemos terminado todo en cuestión de segundos. Ella nos quería felices pero sanos, muy simple sin embargo desafortunadamente bastante difícil de llevar a cabo en estos días.

Lo mismo ocurrió con el zumo de frutas, había naranjas, manzanas, plátanos, pero nunca zumo de manzana o cualquier otro, solo zumo de naranja recién exprimido y en raras ocasiones. Mi madre deseaba que comiéramos realmente la fruta. Esa fue la mejor opción entonces y sigue siendo la mejor opción ahora muchos años después. Sabía demasiado sobre la cantidad de azúcar escondida y los números E (aditivos alimentarios), por lo tanto, nos protegió tanto como pudo.

Mi madre no era una nutricionista ni una doctora, sino una ama de casa absolutamente dedicada a hacer que sus hijos fueran mejores que ella. Ella proporcionaría todo lo necesario y al mismo tiempo enfatizaba la expresión:

“Todo con moderación”

¿Puede ser que nuestros padres solían tener mucho más control de nuestras vidas cuando éramos más jóvenes? ¿O puede que tuviéramos desde el principio mucha más disciplina porque nuestros queridos padres también daban el ejemplo? Ambos comían dulces de vez en cuando y tenían mucho cuidado con la comida al día siguiente … Me gustaría que algunos de los niños con sobrepeso ahora pudieran ver por qué cuando su padre dice ‘no más’ es por su propio bien?

Motivos para reflexionar.

Me pregunto qué le pasó a nuestra generación, dónde nos perdimos como sociedad, y con “eso”, me refiero a que el sentido común dice que dulces son solo dulces, no para todos los días y solo en pequeñas cantidades. ¿No todos saben eso?

Nuestros hijos son el futuro, ¡no lo subestimemos!